CIRUGIA EDUCACION BOLEROS

Como me dijo un gran amigo: tu blog parece el programa de Ferrando "Trampolin a la Fama"

sábado, 19 de diciembre de 2009

LUIS NALVARTE Y CARLOS HUMBERTO VILCHEZ VERA

Este año que nos deja he sentido la partida hacia otras dimensiones de dos personas que han estado muy ligadas a mi desarrollo personal: Luis Nalvarte Robles y Carlos Humberto Vilchez Vera. A los dos los conocí por la misma época, a inicios de los 90, en ámbitos totalmente diferentes . A Lucho en el Club Huancavelica, una peña criolla del Cercado de Lima, también conocido como el Cuartel Primero. A Carlos Humberto como Decano de la naciente Facultad de Medicina de la Universidad de San Martín de Porres. Ambos mayores que yo por lo menos en quince años. Lucho cantando valses criollos y cocinando algunas exquisiteces basada en pescados y mariscos y Carlos Humberto dirigiendo con temple y tesón a la vez que enfrentando casi solitariamente a los opositores de la formación de la nueva facultad. Lucho, pícaro y dicharachero, Carlos Humberto, serio y circunspecto.
Con ambos compartimos muchos momentos a los inicios de los 90. Con Lucho nos reuniamos todos los viernes, y a veces sábados y domingos, a disfrutar de la música criolla ya sea cantando, escuchando o comentando sobre la calidad de los temas musicales. Con Carlos Humberto, en el transcurso de la semana, y cuando nos encontrábamos, intercambiamos opiniones sobre el desarrollo de las clases, la evolución de los alumnos y escuchábamos lo que nos contaba sobre sus peripecias para mantener a flote a la facultad y a raya a los opositores externos.
Luego de algún tiempo de compartir vivencias Lucho me propone ingresar a un selecto grupo de personas que se caracterizan por tener buenas costumbres. De la misma manera Carlos Humberto me propone ser ordinarizado como profesor de la Universidad San Martín de Porres. Ambos hechos ocurrieron simultáneamente en 1990. Este año se dio un cambio importante en mi vida. Con el nuevo grupo de amigos comencé a tratar de desarrollar espiritualmente, a ser conciente de la existencia, necesidad y desarrollo de los valores humanos; la solidaridad, la reciprocidad, el respeto al prójimo, la honestidad en los actos, de la misma manera evitar el odio, el encono y sobretodo el fanatismo. Estos principios se hacían presentes cada vez que teníamos que tomar una decisión. Es posible que desde siempre haya actuado regido por esos principios, pero a partir de ese momento estos pasaron al nivel conciente. Con el ingreso como profesor ordinario a la Universidad pude cumplir uno de mis sueños de estudiante universitario: ser jefe de una asignatura de una facultad de medicina. Y a temprana edad cristalizamos este sueño. Trabajamos rigiéndonos por todos los principios ya mencionados. Sin duda que un comportamiento de esta naturaleza trae muchas satisfacciones pero también vicisitudes.
Pasaron 20 años. Todos ganamos en edad, en experiencia y en enfermedades. La vida nos llevó por diferentes caminos. Lucho se fue a vivir a Estados Unidos luego de perder a su Hermano Favio, a quien yo le decía Padrino, perdida también lamentable. Carlos Humberto fue un exitoso Rector de la Universidad, quien inició el despegue de lo que ahora se considera la primera universidad privada del país. Como en todo orden de cosas, tuvieron admiradores y detractores, estoy seguro que por lejos, mas de los primeros que de los segundo. Los dos apostaron por hacer el bien al prójimo, cada uno con las herramientas y oportunidades que le dio la vida.
Los dos han fallecido y tengo la inmensa pena de no haber podido estar cerca en sus últimos momentos y haber conversado sobre temas que nos apasionaban. Con Lucho, que falleció en Miami, sobre los últimos cantantes y composiciones criollas ó sobre las valoraciones o prelaciones morales en relación a los acontecimientos actuales. Con Carlos Humberto sobre la facultad de medicina, la educación médica o sencillamente sobre la universidad.
En fin con Lucho reconozco su actitud por cultivar la amistad, el respeto al amigo, saber que en esta condición no existen coyunturas políticas, sociales o religiosas, simplemente es el amigo que merece solidaridad, reciprocidad y apoyo cuando lo necesita. En Carlos Humberto reconozco a la persona con temple, perseverancia y disciplina para llevar adelante un proyecto utilizando las armas adecuadas en cada circunstancia y reconociendo a las personas por su real valía.
Lucho que disfrutes arriba con toda la gente que nos adelanto, no dejes de cantar Las Ocarinas ni a Miguel Grau, Carlos Humberto, ahora que estas cerca intercede ante el Supremo para que de luces a las autoridades de la Univesidad que tanto entregaste para que ésta continúe en el sendero de la eficiencia y calidad. Ya nos encontraremos para hacer lo mismo.


El tema Las Cautivas, una recopilacion de Lucas Borja, era uno de los temas preferidos de Lucho. Estoy seguro que a Carlos Humberto tambien le hubiera gustado por el patriotismo que encierra. Lucho, tu le ponías mas "bobo" a la interpretación.

De la época en que fueron repatriados los restos de Miguel Grau, en junio de 1890, datan estos versos en ritmo de valse, rescatados por Lucas Borja en su versión más veraz con el título de "A Miguel Grau" y llevado al acetato por el trío "Los Palomillas" en 1960, sello El Virrey, luego de haber sido propagada en forma fraccionada con el nombre de "Las Cautivas", es también conocida como "Crucero Lima". Vals infaltable los 8 de Octubre en la Escuela Naval del Perú, Día de la Gloriosa Marina de Guerra, fecha en que el Gran Almirante del Perú, Don Miguel Grau Seminario, ofrendó su vida por su país.